En esta utopía filosófica escrita en prisión, Tommaso Campanella imagina una sociedad regida por la razón, la fraternidad y el conocimiento. Dialogando con Platón y Tomás Moro, la obra propone un modelo político basado en la propiedad colectiva, la educación integral y la unión entre religión y ciencia. «La ciudad del Sol» condensa los anhelos de reforma espiritual y social del Renacimiento tardío, en un contexto marcado por la represión inquisitorial y la crisis de la autoridad eclesiástica.